El vicepresidente de este partido opositor fue liberado este fin de semana en Rangún después de que terminara su período de arresto domiciliario. Su liberación llega mientras el relator especial de Naciones Unidas sobre la situación de los Derechos Humanos en Birmania, Tomás Ojea Quintana, visita este país asiático en un viaje oficial de cinco días.
"El secretario general espera que este desarrollo contribuya al avance de un diálogo sustancioso entre el NLD y la Junta Militar birmana como una medida necesaria hacia un proceso político más creíble e incluyente", de acuerdo con un comunicado emitido por su portavoz.
"Para conseguir este objetivo, el secretario general vuelve a pedir a la Junta birmana que elimine sin más retraso las restricciones que pesan sobre la secretaria general del NLD, Aung San Suu Kyi, y libere a todos los prisioneros políticos", añade.
Quintana afirmó la semana pasada que espera poder reunirse con Suu Kyi, que permanece bajo arresto domiciliario, durante su visita. Las elecciones nacionales de este año --las primeras en casi dos décadas-- son el quinto paso de las siete medidas en total que forman parte de la 'hoja de ruta' para conseguir una mayor democratización del país, según la Junta. Quintana, que concluirá su misión con una rueda de prensa en el aeropuerto de Rangún, aseguró que 2010 "es un momento crítico para el pueblo de Birmania".
En su último informe sobre la situación en este país, Quintana aseguró que las autoridades habían perdido la oportunidad de demostrar su compromiso para mantener unas elecciones incluyentes por la ampliación del arresto domiciliario de Suu Kyi, un hecho que la impedía participar efectivamente en los comicios.