Al menos una persona murió y dos más resultaron heridas por la explosión de una bomba en Rangún, la antigua capital de Birmania (Myanmar), en la víspera del desfile militar anual del régimen.
El suceso tuvo lugar anoche en una zona comercial del norte de la ciudad, donde a principios de mes estallaron otros dos artefactos sin causar daños, informó hoy la publicación "The Irrawaddy", ya que los medios estatales birmanos no divulgaron los hechos.
Las autoridades culpan de estos ataques a grupos terroristas formados por disidentes, pues varios de los cometidos en los últimos meses fueron perpetrados coincidiendo con los aniversarios de las protestas antigubernamentales de 2007 y 1988, brutalmente reprimidas por los soldados.
Esta mañana, la jerarquía castrense birmana celebrará en la nueva capital en Naypidaw su habitual parada presidida por el jefe de la Junta Militar, general Than Shwe.
Birmania está gobernada por los militares desde 1962 y no celebra elecciones democráticas desde 1990, cuando la oposición encabezada por Aung San Suu Kyi barrió en las urnas al partido oficial, aunque estos resultados nunca fueron reconocidos por el régimen.
Suu Kyi, galardonada con el Nobel de la Paz en 1991, se halla bajo arresto domiciliario