El coordinador resaltó las urgentes necesidades de las comunidades afectadas en mayo de 2008 por el ciclón Nargis, que dejó más de 140.000 muertos y destruyó los hogares de más de 800.000 personas, especialmente en el delta de Ayeryarwady.
"Mientras que la recuperación de las zonas afectadas por el ciclón Nargis sigue siendo una de las prioridades, la ONU también tiene en cuenta las necesidades de financiación de otras partes del país, donde existen inmensos retos humanitarios y de desarrollo", subrayó. En particular, se refirió a la inminente demanda de refugios y apoyo agrario por la temporada del monzón.