La dirigente opositora y Nobel de la Paz birmana, Aung San Suu Kyi, cree que el juicio que los generales de Myanmar (ex Birmania) propician en su contra es un intento de evitar que lidere un frente de partidos en los comicios del próximo año, según han declarado su representante legal. La disidente, acusada de violar los términos del arresto domiciliario que cumple desde hace 13 años, enfrenta a una petición de condena a prisión de entre tres y cinco años. "Nos ha pedido que exploremos todas las vías legales para ganar este juicio reprobado por la comunidad internacional", ha explicado el letrado Nyan Win este miércoles después de entrevistarse con San Suu Kyi.
A finales de mayo, el tribunal de Yangon que juzga a la Nobel rechazó a la mayoría de los testigos propuestos por su defensa. Los opositores a la Junta Militar de Myanmar interpretaron que este rechazo es infundado y encubre una treta para sabotear la posibilidad de que San Suu Kyi, de 63 años, recupere la libertad.
La disidente es acusada de violar la ley que protege al Estado de "elementos subversivos" después de constatar que el ciudadano estadounidense John Yettaw había accedido a su vivienda a comienzos de mayo. Yettaw cruzó a nado el lago Inya para llegar a ese domicilio, donde permaneció dos días, para "proteger a la Nobel de los terroristas que planeaban asesinarla", según declaró a los tribunales.
Países de Occidente y de Asia han intercedido en favor de la carismática líder de la Liga Nacional para la Democracia sin lograr quebrar la intransigencia de los generales de Myanmar, que accedieron a celebrar elecciones en 2010 para demostrar su deseo de guiar al país por la senda democrática. El juicio contra San Suu Kyi ha vuelto a activar la alerta sobre el clima de tensión y represión política que existe en Birmania, que el letrado Nyan Win ha ejemplificado con un comentario: "la dirigente está molesta porque los militares le prohibieron limpiar su casa, pese a que el arresto domiciliario fue oficialmente levantado". Nyan Win ha agregado: "Ella cree que esa intromisión es inaceptable".