El Consejo de Derechos Humanos de la ONU condenó hoy las violaciones sistemáticas de los Derechos Humanos en Myanmar (antigua Birmania) y pidió el libre acceso de las organizaciones humanitarias a las zonas devastadas por el ciclón Nargis.
El texto, presentado por Eslovenia, en nombre de la Unión Europea (UE), fue rechazado inmediatamente por el embajador birmano, pero, no obstante, fue adoptado sin necesidad de voto.
El documento pide a las autoridades de Rangún que "otorgue a todas las organizaciones humanitarias un acceso inmediato, libre y completo a todas las personas que lo necesiten, en particular las del delta del Irrawaddy".
Asimismo, el texto critica el reclutamiento de niños soldado por las fuerzas gubernamentales y por los grupos armados, y pide una encuesta independiente e imparcial sobre las violaciones en la actual Myanmar, incluido el trabajo forzado.
La resolución exige, además, la apertura de un diálogo real con todos lo partidos políticos y los grupos étnicos, y solicita que las autoridades birmanas reciban al representante especial del secretario general de la ONU, Ibrahim Gambari, así como al relator especial de este organismo, Tomas Ojea Quintana.