Aung San Suu Kyi, líder de la oposición birmana y premio Nobel de la Paz, proclamó este viernes su inocencia ante el tribunal que la juzga desde comienzos de esta semana en la prisión de Insein, en el norte de Rangún. "No soy culpable, no he cometido ningún crimen", aseguró.
La dirigente de la Liga Nacional por la Democracia (LND), privada de libertad durante 13 de los últimos 19 años, es juzgada por infringir las condiciones de su arresto domiciliario, al haber alojado durante dos días al estadounidense John Yettaw, un mormón de 53 años que llegó hasta su casa nadando.
La mayoría de los 23 testigos aportados por la acusación son policías. La defensa, mientras tanto, presentará sus argumentos a partir del próximo lunes.
Los abogados explicarán que Suu Kyi, de 63 años, sólo acogió al ciudadano estadounidense "por piedad", ya que "tenía calambres en las piernas después de haber cruzado el lago" situado junto a la vivienda de la opositora.
Los observadores internacionales consideran que la Junta militar birmana utiliza las acusaciones como un pretexto para mantener encerrada a Suu Kyi durante las elecciones que tendrán lugar el próximo año, informa BBC.