A los ojos de la Junta, los cooperantes somos enemigos. Cualquier extranjero es un enemigo, los que vienen a limpiar de cadaveres los rios, son enemigos, y los que traen la carga de ayuda humanitaria, la pueden dejar en el aeropuerto que ellos se encargaran de distribuirla.
No nos tomaran el pais, bajo excusa de la ayuda militar/ dijo el General ayer mismo. Con esa categoria que caracteriza a los dictadores cuando creen que tienen todo bajo su control incluso los ciclones.
Ayer en la television pasaban una vez tras otras las mismas imagenes, el ejercito habia puesto las etiquetas de - donado por el Gobierno Birmano- debajo del primer envio de ayuda de Tailandia. Interesaba mas hacerse la foto con los famelicos campesinos, y darle un paquete de uno en uno. Como si hubiese llegado los reyes magos del ciclon, que distribuir con rigor y rapidez.
La comunidad internacional ha respondido, y desesperada esta en la frontera esperando poder atender a los supervivientes. Pero la Junta nos esta dando una leccion sobre como se gestiona una crisis humanitaria: ignorarla, reprimirla y tomar el dinero del primer mundo.
Seis dias despues de que volo todo lo que tuvo que volar en el sur de Birmania, aun mantienen que la cifra oficial son 22.000 personas. El empobrecimiento del pais no es solo para los pobres, tambien para los generales que no saben ya ni contar cadaveres. Despues del urgente llamamiento de ayuda al mundo, parece que se ha arrepentido.
La Junta padece de xenofobia, ya lo habia demostrado con su tratamiento a las minorias etnicas. Pero ahora tiene tambien paranoia, no quiere ningun demonio extranjero que venga a colonizar el Delta del Irrawaddy. Quiere la ayuda pero sin tecnicos, sin protocolos, sin estadisticas, sin que se sepa la verdad del asunto. Quiere los dolares pero que no entre la libertad, ni tampoco los extranjeros puedan hablar con los campesinos. Tiene miedo de mirar al otro a la cara, y eso no es mas que un signo de debilidad.
Si se pudiera entrar aunque fuese por el aire, en pocas incursiones se lograria al menos que los que sobreviven tuvieran lo mas minimos. Pero la Junta cree en los poderes magicos , como la onminiscencia y la omnipresencia.
El ejercito birmano son 500.000 soldados, y tiene miedo de los solddos extranjeros. Argumentan que pueden entrar armas en el pais dentro de las cajas de ayuda humanitaria, y montar una revolucion. Los argumentos que utilizan son increibles. Mientras las agencias y la ONU se esfuerza en la negociacion, en explicar que Birmania no tiene experiencia en la gestion de un desastre semejante, que nadie quiere hacer politica sino ayudar.
La Junta da visados a los turistas de un mes , pero los periodistas no son bienvenidos. Durante decadas han gobernado un pais imponiendo unas leyes restrictivas: prohibido el uso de moneda extranjera, cualquier desplazamiento fuera de Rangun debe de ser comunicado. Algunos analistas politicas con los que he hablado vieron el traslado de la capital a Naypyidaw como un signo de miedo: tienen miedo de una invasion extranjera
La Onu que ya ha demostrado ser incapaz de poner en cintura al regimen, ahora tampoco ha conseguido ni que el General se ponga al telefono con Ba-ki-Moon. Que vamos a pensar los ciudadanos de todos los paises que hemos donado mas de 40 millones de dolares al pueblo birmano, si esa ayuda no llega, o si llega y se queda almacenada mientras la gente se muere.
Quien es capaz de hacer algo serio en esta crisis....
Son mas de 5000 kilometros cuadrados en el delta del rio Irrawaddy- la region mas rica en la produccion de arroz de Birmania- esta todo inundado, los efectos del ciclo llegaran al menos a 24 millones de personas. Las Agencias Humanitarias y Naciones Unidas pueden ir pensando en los efectos catastroficos en la agricultura birmana y en el arroz.
La Junta no tiene dilema entre ciclon o referendum.... referendum. El dilema es nuestro.